Nació en Arredondo (Santander) hacia 1818. El 10 de mayo de 1843 solicitó de la Academia de San Fernando su admisión a los ejercicios para la clase de maestro arquitecto, presentando como prueba de pensado el proyecto de «un edificio destinado a Gavinete, ó Museo de historia natural con las Cátedras de enseñanza y demas dependencias que ha creido necesarias», junto con su informe facultativo y el avance del coste de la obra, la partida de bautismo, la certificación de dos cursos de Matemáticas aprobados, la certificación de práctica librada por su profesor particular, el académico Herrera de la Calle,  y la justificación de su conducta moral y política.

La Comisión de Arquitectura celebrada la tarde del 27 de mayo de 1843 examinó la obra y los documentos aportados acordando el pase del pretendiente al resto de los ejercicios de reglamento. Fue admitido en la Junta Ordinaria del 28 del mismo mes, fecha en la que le fueron sorteados los programas de repente. Le tocaron en suerte los números 114, 92 y 34 nuevos, los cuales respondieron respectivamente: «Puente triunfal adornado magníficamente con algun orden de Arquitectura en la parte que convenga. Planta y alzados», «Ynventar un tabernáculo adornado con columnas y pilastras de orden corintio con sagrario y mesa de altar para colocarle aislado en un Presbiterio; diseñando la planta, fachada y corte de un tamaño proporcionado» y «Un templo antiguo circular con porticos interior y exterior, guardando la misma forma y los intercolumnios arreglados á los generos de los ordenes que sean elegidos. Planta, fachada y corte». De los tres asuntos eligió el nº 114, es decir, un Puente triunfal adornado con algún orden de arquitectura (A-3652), cuya elección comunicó a la corporación académica el 8 de junio.

La Junta de Examen celebrada para examinarle en la clase de maestro arquitecto tuvo lugar la tarde del 14 de junio de 1843, asistiendo a ella como vocales Custodio Moreno, Antonio Conde González, Atilano Sanz, Eugenio de la Cámara y Juan Miguel de Inclán. Cotejada la prueba de pensado con la obra de repente que el interesado explicó una vez entrado en la sala, se procedió a la realización del examen teórico. Alonso Solano principió este nuevo ejercicio contestando a las preguntas que le hicieron los profesores sobre la forma de los terraplenes en su proyecto de puente y las razones por las que había preferido los arcos apuntados a los triángulares que presentaba, motivo por el que explicó el choque de los fluídos y su reflexión. Enseguida se adentró en las máquinas necesarias para la construcción de la cantería, como la medida de las superficies y los sólidos con ejemplos contraidos a las esferas y los cilindros. Midió después una superficie circular determinada y buscó el radio correspondiente a otra de superficie dupla. Continuó su ejercicio resolviendo varios problemas geométricos y tratando las corrientes, la construcción de un pilar, sus cimientos y pilotajes. También se le cuestionó acerca de su obra de pensado, para después explicar el tratado de las bóvedas y su contrucción, tanto las de rosca como tabicadas. Se explayó en los arcos y sus formas, deteniéndose en la teoría de la curvas y los datos para hallar el espesor de los muros según fuesen éstos, y por último, se le hicieron otras tantas preguntas relativas a la teoría y práctica de la profesión.

En vista de que contestó a las diferentes preguntas con incertidumbre y poca seguridad, fue reprobado en la clase de maestro arquitecto por tres votos en contra frente a dos a favor, dictámen que sería aprobado por la Academia en la Junta Ordinaria del 9 de julio de 1843.

Comisión de Arquitectura. Arquitectos. 1843. Sig. 2-12-2; Libro de actas de juntas ordinarias, extraordinarias, generales y públicas, 1839-1848. Sig. 3-90. Libro de actas de juntas ordinarias, extraordinarias, generales y públicas, 1848-1854. Sig. 3-91.

Silvia Arbaiza Blanco-Soler
Profesor TU de la UPM