Nació en Burgos hacia 1777.  Antes de obtener el título de maestro de obras practicó la arquitectura durante más de veintiocho años en su ciudad natal. En el transcurso de ese tiempo aprendió la teoría de la arquitectura, estudió Aritmética y Geometría por espacio cuatro años en la Escuela de Dibujo de Burgos  y desde  1818 la copia de los cinco órdenes de arquitectura y los principales ramos de la arquitectura civil y la montea, conocimientos que puso en práctica en casas particulares de nueva planta, en la reforma de otras, algunos molinos harineros y sus presas, como en la reparación de varios templos, concretamente la Metropolitana de aquella ciudad al ser maestro de ella.

Tenemos constancia que realizó e intervino en numerosas obras dentro de la ciudad de Burgos y su provincia, pudiendo destacar el presbiterio y adoquinado de la iglesia de la villa de Salas de los Infantes; el presbiterio del templo de Santa Águeda; la iglesia del barrio de Villatoro; la Capilla de los Santos Mártires; el monasterio de San Pedro de Cárdena; la portada de la Capilla del Ilustrísimo Cristo del convento de Padres Trinitarios de la villa de Arcos y la antigua del convento de San Agustín a extramuros de la ciudad; varias reparaciones en las agujas y otros sitios de la Santa Iglesia Metropolitana de Burgos; el presbiterio de la iglesia de San Cosme; las casas de Santiago Rodríguez, Manuel Carranza, Manuel López y Tomás Martínez, como las portadas de las casas y tiendas de la Plaza Mayor; un molino y la presa en la villa de Arcos, como un recalce y estribo en el palacio del Mercado, propio del duque de Frías. También sabemos que el Ayuntamiento de la ciudad de Burgos le nombró su alarife interino en 1816 tras la muerte del arquitecto León Antón, cargo que había ejercido desde 1813 como único arquitecto en las ausencias y enfermedades de su predecesor.

Cuando el 26 de febrero de 1819 solicitó de la Academia su admisión a los ejercicios para la clase de maestro de obras se encontraba realizando en Burgos el palacio y la reposición de las casas de la marquesa de la Vilueña; la iglesia parroquial de San Pedro de la Fuente en calidad de segundo,  con las doce casas contiguas a la misma para ser arrendadas, templo levantado bajo los planos del arquitecto Joaquín Ignacio de la Vilueña; la fachada principal y la torre de la iglesia del Real Monasterio de San Juan y la reparación de su hospital, habiendo ejecutado los diseños el teniente director de la Real Academia Juan  Miguel de Inclán Valdés.

A su solicitud de admisión en la clase de maestro de obras adjuntó la certificación de Miguel de Inclán que señalaba los trabajos que el pretendiente se encontraba desarrollando en esos momentos, las certificaciones libradas por Antonio Carrillo, Antonio Alonso, Gregorio Quintanilla, Manuel Lorente y Manuel López, además de los dibujos de una  Aduana para Burgos (prueba de pensado, del A-1045 al A-1047) con su correspondiente informe facultativo y el avance del coste de la obra calculada en 3.268.102 reales y 17 maravedíes de vellón. «Dha R^l Aduana, que consta de Piso bajo y pral se alla proyectada sobre un Paralelogramo, de Trescientos seis pies de Fachada, por ciento Noventa y cuatro pies de Fondo, o costado». Su cimentación era de zanja corrida hasta el nivel del río Arlanzón macizada con mampostería asentada con mezcla de cal y arena, aunque en los parajes de poca consistencia había previsto la utilización de pilotes. Puertas, arcos y ventanas estaban diseñados de sillería hasta el piso principal; los arcos de las ventanas, los de las cuatro fachadas y la puerta principal eran adintelados mientras que de medio punto las cuatro puertas de entrada de carros y la de los patios. Las paredes interiores eran de mampostería, demarcándose todos los vanos de puertas y ventanas con sillares. Proyectó la fábrica del piso principal de ladrillo cogido con mortero de cal, mismo material para las jambas y los arcos, a excepción de los balcones y las cornisas que lo eran de sillería. Las bóvedas de ladrillo tabicado y doblado con sus enjutas macizadas y la armadura de pares y tirantes terminada con teja.

La Comisión de Arquitectura del 9 de marzo de 1819 examinó la obra y los documentos aportados, acordando el pase del pretendiente al resto de los ejercicios de reglamento. Fue admitido en la Junta Ordinaria del 14 de marzo, momento en el que le fueron sorteados los programas de repente, tocándole en suerte Una casa particular en un terreno de figura y dimensiones arbitrarias (A-5734).

La Junta de Examen tuvo lugar el miércoles 24 de marzo de 1819, asistiendo a ella como vocales Pedro Franco, Antonio López Aguado, Juan Antonio Cuervo, Julián de Barcenilla, Alfonso Rodríguez, Manuel de la Peña y Padura, Juan Miguel de Inclán, Custodio Moreno y Martín Fernández de Navarrete, este último en calidad de secretario. Cotejada la prueba de pensado con la obra de repente que el interesado explicó una vez entrado en la sala, se procedió a la realización del examen teórico. Barroeta principió este nuevo ejercicio contestando a las preguntas que le hicieron los profesores acerca del replanteo de los edificios y los métodos para tasarlos; la nivelación de los terrenos, la fortificación de las paredes, la calidad de los materiales y sobre otras cuestiones relativas a la teoría y práctica de la arquitectura.

Satisfechos los examinadores con las obras ejecutadas y las contestaciones dadas a las preguntas formuladas le hallaron hábil para ostentar el título de maestro de obras, grado que le fue concedido en la Junta Ordinaria del 18 de abril de 1819, a los 42 años de edad.

La Academia conserva entre sus fondos un dibujo de Las casas que intenta construir la señora Marquesa de la Vilueña en Burgos (A-1433), posiblemente realizado por Barroeta entre 1819 y 1820 cuando estaba llevando a cabo la obra.

El 1 de diciembre de 1821, Dionisio Badiola remitió a la Academia una serie de planos que había elaborado de una escuela de primeras letras y ambos sexos para la villa de Soto de Cameros (La Rioja) a expensas de la beneficencia de Juan Esteban de Elías mientras que el 23 de abril de 1822 Benjumeda remitió otros de su mano a Francisco Elías para que los enviara a Badiola y éste a su vez a informe de la corporación. Los planos y el pliego de condiciones de Benjumeda como el calculo de la obra ejecutado por Simón de Barroeta en 307.000 reales fueron aprobados por la Academia en la Junta Ordinaria del 12 de mayo de 1822.

Arquitectura. Universidades, Institutos, Escuelas, s. XVIII y XIX (1789-1861). Sig. 2-29-2; Comisión de Arquitectura. Informes 1808-1822. Sig. 1-29-5; Comisión de Arquitectura. Maestros de Obras, 1789-1845. Sig. 2-23-5; Libro de registro de maestros de obras aprobados por la Real Academia, 1818- 1886. Sig. 3-156, nº 10.

Silvia Arbaiza Blanco-Soler
Profesor TU de la UPM