Se trata de tres láminas de cobre, aunque existe una cuarta titulada El cantor ciego, que fue pronto separada del resto. En ellas se aprecia el gran dominio técnico de Goya, aunque los trazos y los perfiles presentan mayor suavidad que los aguafuertes que había realizado anteriormente. Los reversos de las tres matrices conservan composiciones similares a las del anverso, pero menos trabajadas. En la actualidad, existe unanimidad en considerar que dos de estos reversos, la Maja sobre fondo claro y el Embozado, no fueron realizados por el artista, mientras que con el tercer verso, Vieja columpiándose, existen dudas sobre su atribución a Goya. (Fuente: Museo del Prado)

Estas láminas de cobre, junto con dos planchas del grupo Prisioneros, fueron vendidas por Mariano Goya en 1859 al secretario de la Embajada de Reino Unido en Madrid, John Savile Lumley. Ya en el siglo XX, la galería londinense Colnaghi compraba los cobres en 1926, vendiéndolos en 1938 al coleccionista de Arte Philip Hofer, quien los donó al Museum of Fine Arts de Boston en 1970. Con motivo de esta donación, Eleanor Sayre publicó un catálogo razonado. Veinticinco ejemplares de esa edición, numerados en romanos, llevaban incluidos dos juegos con los seis aguafuertes, que fueron estampados por Emiliano Sorini en Nueva York. (Fuente: Javier Blas Benito)